1 Recuerdo a una niña llamada Sofie que quería un perro. Su madre, decía: "El perro o yo" Tú decides". Durante meses, ésa fue la discusión entre Sofie y su madre. Al final, Sofie le escribió una nota a su madre enumerando las cosas en las que mejoraría si le dejaba tener un perro. Para la sorpresa de todos, ¡la mamá de Sofie aceptó!. Fue muy convincente la carta de Sofie. La vida no es sólo lo que me pasa a mí, o a tí; es lo que nos pasa a todos, por lo tanto tenemos que aprender a negociar por algo que verdaderamente deseamos pensando en una ganancia mutua. Este, es, os lo aseguro, uno de los hábitos que más felices nos puede hacer. Estos son los primeros pasos para ir aprendiendo a negociar saliendo todos ganando pregúntale a una persona mayor qué es lo mejor que puedes hacer por los demás. Después, házlo. Trata de pasar un día entero sin enfadarte, poner mala cara ni quejarte. La próxima vez que vayas a discutir o pelear por el mejor juguete, pregúntate cómo podrías ...